TE PUEDEN ROBAR
Fuente : INFOBAE
domingo, 14 de diciembre de 2008
El "skimming" no requiere contacto entre el ladrón y su víctima. Se utilizan dispositivos electrónicos que copian las claves de los usuarios. Los perjudicados suelen ser los asalariados y jubilados
Expertos en seguridad bancaria dieron detalles de la nueva maniobra. Una de las novedades es que no requiere de la presencia física del delincuente ni de un abordaje cara a cara a su potencial víctima.
El fraude supera así el famoso procedimiento delictivo que consta en introducir un elemento extraño en la ranura del cajero automático, de modo tal de trabar la tarjeta y luego convencer al usuario de que revele la clave para utilizarla una vez que la víctima abandona los intentos por recuperarla.
Un especialista de una de las redes de cajeros automáticos, que pidió reserva de su identidad, explicó a un matutino que el "skimming" consiste en colocar "dispositivos electrónicos especialmente adulterados para capturar los datos de las bandas magnéticas de las tarjetas y las claves de los usuarios".
El sistema requiere profundos conocimientos tecnológicos y una gran infraestructura, pero alcanza con poca gente para llevarlo a cabo.
El fraude es simple, una vez introducida la tarjeta en la ranura del cajero, el sistema montado previamente por el maleante, captura la clave secreta tecleada por el usuario.
A continuación, el delincuente no tiene más que esperar la salida del incauto y el siguiente paso consiste en ingresar los datos obtenidos a un sistema informático que permite leerlos y luego volcarlos en una "tarjeta blanca" con su banda magnética virgen.
Con el plástico clonado y la información, el "skimming" tiene todo para hacerse del efectivo del estafado.
El delito preocupa a las autoridades ya que los plásticos son cada vez más utilizados. Los perjudicados suelen ser asalariados e incluso jubilados.
La Argentina ocupa el puesto número ocho en un ranking de países afectados por fraudes contra cajeros automáticos que se presentó el año pasado en la exposición "Segurinfo". En la región, Brasil, México y Colombia encabezan la lista de naciones con más ataques de este tipo.
Expertos en seguridad bancaria dieron detalles de la nueva maniobra. Una de las novedades es que no requiere de la presencia física del delincuente ni de un abordaje cara a cara a su potencial víctima.
El fraude supera así el famoso procedimiento delictivo que consta en introducir un elemento extraño en la ranura del cajero automático, de modo tal de trabar la tarjeta y luego convencer al usuario de que revele la clave para utilizarla una vez que la víctima abandona los intentos por recuperarla.
Un especialista de una de las redes de cajeros automáticos, que pidió reserva de su identidad, explicó a un matutino que el "skimming" consiste en colocar "dispositivos electrónicos especialmente adulterados para capturar los datos de las bandas magnéticas de las tarjetas y las claves de los usuarios".
El sistema requiere profundos conocimientos tecnológicos y una gran infraestructura, pero alcanza con poca gente para llevarlo a cabo.
El fraude es simple, una vez introducida la tarjeta en la ranura del cajero, el sistema montado previamente por el maleante, captura la clave secreta tecleada por el usuario.
A continuación, el delincuente no tiene más que esperar la salida del incauto y el siguiente paso consiste en ingresar los datos obtenidos a un sistema informático que permite leerlos y luego volcarlos en una "tarjeta blanca" con su banda magnética virgen.
Con el plástico clonado y la información, el "skimming" tiene todo para hacerse del efectivo del estafado.
El delito preocupa a las autoridades ya que los plásticos son cada vez más utilizados. Los perjudicados suelen ser asalariados e incluso jubilados.
La Argentina ocupa el puesto número ocho en un ranking de países afectados por fraudes contra cajeros automáticos que se presentó el año pasado en la exposición "Segurinfo". En la región, Brasil, México y Colombia encabezan la lista de naciones con más ataques de este tipo.
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